El propósito de las uniones estrechas es evitar que el líquido se escape entre las células, permitiendo que una capa de células (por ejemplo, las que recubren un órgano) actúe como una barrera impermeable. Por ejemplo, las uniones estrechas entre las células epiteliales que recubren la vejiga evitan que la orina se filtre al espacio extracelular.
¿Qué es la unión célula-célula?
Las uniones celulares son grandes complejos proteicos que se encuentran en la membrana plasmática, que proporcionan contactos entre células vecinas o entre células y la matriz extracelular (MEC). Los principales tipos de uniones celulares son las uniones adherentes, los desmosomas, los hemidesmosomas, las uniones comunicantes y las uniones estrechas.
¿Cómo se forman las uniones celulares?
Estas uniones se forman a partir de seis moléculas de conexina que se agregan para formar un hemicanal o conexión en cada célula; cuando estos hemicanales en las membranas opuestas de dos células se alinean, forman un canal con un poro que permite el paso intercelular de moléculas de señalización, metabolitos, vitaminas y otros…
¿Dónde se producen las uniones celulares?
Ubicación. Las uniones abiertas se encuentran en muchos lugares del cuerpo. Esto incluye los epitelios, que son los revestimientos de las superficies corporales, así como los nervios, el músculo cardíaco (corazón) y el músculo liso (como el de los intestinos). Su función principal es coordinar la actividad de las células adyacentes.
¿Cómo se unen las células?
Las células se mantienen unidas por varios complejos diferentes: uniones estrechas (discutido en la conferencia sobre epitelios), uniones adherentes y desmosomas. Estas uniones consisten en proteínas integrales de membrana que contactan con proteínas en células vecinas y que están unidas intracelularmente al citoesqueleto.