Ser engañado no solo puede afectar tu autoestima y autoestima; también puede afectar la forma en que tratas a los que te rodean. La ira acumulada, la amargura o el dolor pueden mostrarse en la forma en que actúas con las personas con las que te encuentras. “La confianza es muy sagrada.
¿Cómo afecta el engaño a una persona?
Ser engañado es una de las cosas más devastadoras y dañinas que pueden pasar en la vida de una persona. Puede conducir a angustia emocional, ansiedad, depresión, un aumento en el comportamiento de riesgo y dolor físico real. La infidelidad de una pareja puede incluso cambiar la química de nuestro cerebro.
¿Puede una relación volver a la normalidad después de ser infiel?
Los expertos dicen que es posible que las parejas tengan una relación feliz después de la infidelidad, siempre que estén dispuestos a trabajar. “La pareja puede sobrevivir y crecer después de una aventura”, dice Coleman. “Tienen que hacerlo; de lo contrario, la relación nunca será gratificante”.
¿Cómo cambia el hacer trampa a tu tramposo?
A pesar de la emoción inicial de una aventura, hacer trampa puede afectar negativamente al infiel emocionalmente. Es común que sientan ansiedad, culpa, vergüenza, preocupación, arrepentimiento, confusión, vergüenza y autodesprecio cuando contemplan cómo sus acciones impactan a sus seres queridos y por qué los engañaron en primer lugar.
¿Los tramposos vuelven a hacer trampa?
Los expertos dicen que no. Los consejeros de relaciones han visto a muchas parejas perseverara través de trampas y el tramposo nunca volverá a hacer trampas. Por otro lado, sucede lo contrario con la misma frecuencia. Según algunos estudios, alguien que ha engañado antes tiene 3 veces más probabilidades de volver a engañar en su próxima relación.